En las redes sociales, ¿estamos priorizando el SEO antes que el buen contenido?

No es un secreto para nadie que se dedique al mundo de la comunicación que un buen posicionamiento de nuestro contenido en Internet nos gusta y nos motiva. Ya que escribimos, ¿qué menos que lo vea todo el mundo? ¿No es a eso a lo que aspiramos todos aquellos que le dedicamos tiempo a un blog? Pero, personalmente creo que estamos dejando buenos contenidos de lado porque no posicionan lo suficiente.

¡Hasta miramos la hora que más efectiva es para lanzar un tweet! Está claro que una gran difusión es lo bueno, pero ¿no es mejor una difusión de calidad?

Muchos expertos en SEO (Search Engine Optimization) dirán que es una pieza fundamental para el posicionamiento aunque el contenido no sea muy brillante, pero la realidad es esta:

• Contenido mediocre + SEO extraordinario = resultados mediocres de posicionamiento en Google
• Contenido extraordinario + SEO mediocre = resultados buenos de posicionamiento en Google
• Contenido extraordinario + SEO extraordinario = el ideal que todos buscamos

En una red saturada de consejos sobre cómo mejorar la comunicación, qué hacer y qué no hacer en las redes sociales, etc… ¿No es preferible hacer un contenido de calidad y tener una buena lista de seguidores? Cierto es que es más fácil decir que hacer. Muchas veces, la falta de tiempo, de inspiración, etc… nos hace caer a todos en la misma trampa: la de replicar contenido de ajenos, poner cualquier frase típica, etc… Hasta que al final nos convertimos en expertos “content curators” (anglicismo que significa que nos dedicamos únicamente a compartir contenido sobre un tema en el que nos especializamos pero no creamos contenido propio)

Las redes sociales nos dan la oportunidad de tener un canal donde comunicar, expresar nuestros conocimientos, opiniones, etc… y está muy bien, pero tenemos la responsabilidad de crear unos contenidos que enriquezcan y que aporten novedades.  Debemos convertirnos en usuarios que creen contenido de calidad, o novedoso por lo menos. Solo entonces es cuando nos convertiremos en una fuente de información de confianza a la que otros usuarios recurrirán.

Y es que, al final no importa tanto la estrategia de social media que hayamos montado como lo que aportemos con nuestras publicaciones porque, como ya he dicho antes, solo el contenido interesante es el que va a merecer la pena compartir y el que dará los mejores resultados.