All I want for Christmas is you! Los mensajes que rodean la Navidad

Desde principios de diciembre, y bajo la batuta de El Corte Inglés, empezamos a cantar los villancicos de Mariah Carey y a preparar la llegada de la Navidad. Los mensajes de amor y felicidad vuelan de un lado a otro. Unos mensajes que no son expresados en otros momentos, sino cuando el final del año está muy cerca. Es ahí cuando tenemos la necesidad de decir a nuestros seres queridos los que significan para nosotros.

Al llegar la Nochebuena crece en nosotros el espíritu navideño. Intercambiamos felicitaciones con familiares y amigos, ya sea en tono serio o con humor, pero siempre en relación al amor, la alegría y la ilusión. Esto se deriva de la construcción social que se ha hecho de la Navidad en torno a los valores cristianos. Otro tipo de fiestas, como son Carnaval o Halloween, transmiten unas emociones completamente diferentes. Sin embargo, en diciembre, los sentimientos y las emociones se magnifican y, según los psicólogos, se despierta en nosotros el deseo de expresar cuánto apreciamos la presencia de los demás en nuestras vidas.

Aunque en esencia, en todas partes del mundo y a pesar del cambio de siglo, los mensajes no han variado, si lo han hecho los canales por los que se nos felicitamos. Las tradicionales postales navideñas enviadas por Correos han sido sustituidas por los grupos de WhatsApp. Desde las empresas, como parte de la comunicación corporativa, se manda una felicitación por email. Y los mensajes no estarían completos sin la presencia de los emoji. La felicitación necesita de  árbol de Navidad, árbol de Navidad, matasuegras, aplauso, gitana negra. Una forma de demostrar mayor expresividad y afecto hacia aquellos que están lejos.

Pero no todo iba a ser amor y festejos. También son muchas las veces en que los sentimientos de paz y bondad no transfieren más allá de la pantalla del Smartphone. Según estudios, un 65% de la población española experimenta grandes dosis de estrés y ansiedad ante las compras, celebraciones y compromisos sociales de la Navidad. Dentro de ese porcentaje, un 30% se siente agobiado por la obligación de felicitar a su agenda de contactos antes de las cenas. Entonces, ¿son reales todos esos deseos y emociones? Al menos los de la mayoría sí.

También desde Duomo Comunicación nos unimos a la corriente digital de mensajes navideños y os felicitamos las fiestas, esperando que el Año Nuevo venga cargado de buenos propósitos. ¡Árbol de Navidad, árbol de Navidad, matasuegras, aplauso, gitana negra! 

 

Abigail Rodríguez 

Social Media Strategist