2020: el año en el que reinventamos nuestra forma de trabajar

Hace ahora justo un año que la Organización Mundial de la Salud (OMS) calificó el brote de coronavirus como pandemia. Esta nueva situación ocasionó que gobiernos de todo el mundo se enfrentaran a esta emergencia de salud pública con un confinamiento masivo en sus países. Desde ese momento, la covid-19 ha sido –y sigue siendo– una situación adversa que ha cambiado, además de nuestras costumbres, nuestra forma de trabajar.

 

Adaptación a un nuevo escenario: algunos datos

Con el anuncio del confinamiento el 14 de marzo de 2020, las empresas se vieron empujadas a un nuevo escenario que requería una adaptación inmediata. Dijimos “adiós” a los compañeros en la oficina y decíamos “hola” a una nueva forma de trabajar a distancia que nos ha acompañado durante muchos meses y que ha sido posible, fundamentalmente, gracias a las nuevas tecnologías. De un día para otro conocimos el teletrabajo, una práctica que, según el INE[1], en 2019 solo realizaban un 4.8% de profesionales en España, cifra que pasó al 34% en el confinamiento[2] Permanentemente conectados, el uso de internet se incrementó de manera notable[3]: entre agosto y noviembre de 2020 el 93,2% de las personas de 16 a 74 años utilizó Internet (2,5 puntos más que en 2019).

¿Y cómo nos hemos adaptado las empresas y los empleados?

Ante la nueva situación, en Duomo Comunicación también nos hemos adaptado y, aunque no nos hemos visto físicamente, hemos continuado trabajando de forma online como tantas empresas en nuestro país gracias a todas las herramientas y recursos tecnológicos a nuestro alcance.

Hemos planificado el día a día dando cabida a videollamadas, webinars, conferencias telefónicas a 3, reuniones online con clientes…Un nuevo entorno digital, forzado por el confinamiento, que nos ha hecho añorar más si cabe los cafés, las conversaciones con los compañeros y el ajetreo diario de la oficina. En estas circunstancias, complicadas en muchos casos, hemos logrado mantener la colaboración entre los miembros del equipo, al mismo tiempo que practicábamos la empatía, la paciencia y la comprensión entre todos.

Doce meses después, hemos aprendido a mejorar nuestra interacción de manera digital, a saber que no siempre es necesaria la presencia física, que muchos trámites los podemos hacer online… pero seguiremos siendo de la opinión de que no hay mejor comunicación que la que se realiza con cercanía física y personal.


[1] Boletín informativo INE: El teletrabajo en España y la UE antes de la COVID-19 https://bit.ly/2PQ7f1c

[2] Informe IVIELAB: EL IMPULSO AL TELETRABAJO DURANTE EL COVID-19 Y LOS RETOS QUE PLANTEA https://bit.ly/3rMAtfD

[3] Encuesta INE sobre Equipamiento y Uso de Tecnologías de Información y Comunicación en los Hogare https://www.ine.es/prensa/tich_2020.pdf