Los propósitos del buen comunicador en 2016
Con la llegada del Año Nuevo, de un bonito y bisiesto 2016, todos nos hemos hecho propósitos. Aún estamos a tiempo de añadir algunos más a la lista y llevar nuestra labor comunicativa a un nivel superior los doce meses que están por venir. U once y medio.
En un medio, agencia, gabinete de comunicación, blog… sea cual sea la rama de la comunicación a la que nos refiramos, siempre hay aspectos que podemos mejorar y que se ven debilitados por el ajetreo del día a día y el yugo que imponen los tiempos de entrega y publicación y los objetivos empresariales. En Duomo Comunicación nos hemos apuntado los siguientes propósitos como indispensables para la puesta en marcha de una comunicación más eficaz este año.
1.- Ampliar conocimientos y estar siempre informados: sobre todo para quienes trabajamos con la red, pero para todos los comunicadores, es importante estar a la última en lo que se refiere a novedades en nuestro campo de trabajo. Un profesor muy sabio decía a sus alumnos que un comunicador es un eterno aprendiz. Y ahí está la clave. En sumar siempre conocimientos que enriquezcan nuestro trabajo.
El aprendizaje diario va de la mano del dominio de la información con la que se trabaja. Debemos saber mejor que nadie todos y cada uno de los detalles que rodean nuestros mensajes clave, porque un fleco suelto puede convertirse en la chispa que inicie un incendio. Todas las posibilidades han de estar bajo control. Que ya decía Murphy que si algo puede salir mal….
2.-Conocer a la perfección al público objetivo: para que los mensajes lleguen a los receptores será necesario conocer a quienes nos estamos dirigiendo. Una escucha activa de cómo son nuestros lectores, compradores, telespectadores… hará más eficaz la comunicación y, por lo tanto, obtendremos una mejor respuesta por parte del público. Al mismo tiempo, en su comportamiento se encuentran muchas veces las pistas de por qué camino hay que continuar para cumplir con los objetivos marcados.
La presencia de las redes sociales y nuevos canales digitales aumenta las posibilidades que tienen las empresas de obtener información acerca de sus públicos. La apertura y mantenimiento de más de un canal de comunicación bidireccional con los receptores de nuestros mensajes, basado en información de calidad y fiable, nos permitirá saber en qué están más interesados y cuáles son sus preferencias. Siempre ojo avizor a los bulos que corren por Internet y que tan fácilmente se expanden a través de la social media.
3.-Continuar trabajando en la comunicación interna: para que la labor comunicativa sea efectiva, es fundamental que, en el seno de la empresa, el fluir de la información sea continuo. Mantener informados a todos los miembros del equipo evitará problemas y crisis de comunicación y contribuirá a la consecución de los objetivos establecidos. También el clima de trabajo se ve beneficiado, ya que se genera una mayor confianza por parte de los empleados cuando se los hace partícipe de las acciones que se están llevando a cabo.
4.-Hacer los contenidos más atractivos: ante una realidad donde cada vez es más difícil llamar la atención del público, los contenidos son quienes dictan quienes se llevan el éxito. Mantener la concentración de los lectores de forma continua es muy complicado debido al ritmo de vida que llevamos y a las millones de fuentes que se pueden consultar en Internet. La competencia conforma un abanico muy amplio de posibilidades entre las que tenemos que destacar. La creación de contenidos que se diferencien del resto y atraigan a nuestro público objetivo supondrá, hablando por ejemplo de un producto digital, un mayor tráfico hacia nuestra web y la creación de una corriente de simpatía hacia nuestra marca.
5.-Reconocer los errores y controlar los mensajes: como ocurre con las relaciones interpersonales, cuando cometemos un error en la comunicación, ya sea en redes sociales o cualquier otro soporte, la mejor idea es dar cuenta del mismo. Asumir el error y proceder al control de la situación, estructurando los mensajes que serán emitidos a continuación por la empresa, evitará acusaciones por parte de terceros y una mala interpretación de nuestras acciones. Contar con el primer turno de palabra hará que podamos describir nuestra realidad, con la ayuda de los mensajes clave que queramos emitir para reducir los efectos negativos de los equívocos. Esto no significa que no haya que enmendar el error, pero querer ocultar los errores conduce a una mayor desconfianza por parte del público.
6.-Afrontar cada día con optimismo: muchas veces tenemos que hacer frente a noticias desagradables o a hechos que nos conmueven y que no son fáciles de tratar. Como la realidad puede ser triste por naturaleza, la mejor idea es que afrontemos cada día con optimismo y con ganas de trabajar en aquello que más nos gusta. Añadiendo a los temas de que vayamos a hablar unas notas de color, construiremos mensajes menos planos a través de los cuales también se pueden transmitir emociones a los receptores.
Ahora sí. Ya puedes continuar tu camino 2016, que nosotros estamos preparados para recorrerlo.
Abigail Rodríguez
Social Media Strategist